En mi llegada a este hermoso país como Embajador de la República  Argentina, cargo con que me ha honrado el Sr. Presidente de la Nación Ing. Mauricio Macri, quiero transmitir un afectuoso saludo al pueblo ecuatoriano y a sus autoridades. La relación bilateral entre nuestros dos países se ha fortalecido durante estos años en todos los ámbitos, político, económico, cultural, educativo y en cooperación. Nunca antes en la historia de nuestras dos naciones se había dado una interrelación tan estrecha y profunda entre nuestros pueblos. Cada vez más argentinos descubren los atractivos de este país tan diverso y  cada vez más ecuatorianos eligen a la Argentina como destino preferente para estudiar y realizar especializaciones y postgrados.

Mi función como Embajador va a ser la de profundizar e incrementar los vínculos entre los dos países, facilitar la generación de  proyectos conjuntos en todas las áreas e impulsar los contactos y negocios entre las empresas y particulares. Esta tarea se inserta en un contexto irreversible de integración sudamericana en que ambos Gobiernos están comprometidos activamente, y en este sentido deseo destacar a la UNASUR, cuya sede está aquí en Ecuador, en la Mitad del Mundo, organismo regional que debemos fortalecer.

A los argentinos residentes en Ecuador quiero manifestar mi compromiso por apoyar  las actividades que realicen en este país y mejorar, día a día, la atención que se les brinda en las áreas consulares, tanto en Quito como en Guayaquil.

Este es un año importante para la Argentina, en el cual celebramos el 9 de julio el Bicentenario de la declaración de la Independencia. Orgullosos de nuestra cultura, tradiciones y logros como país, queremos avanzar de la mano de nuestros vecinos y hermanos latinoamericanos hacia un futuro común de prosperidad.

Este festejo es particularmente trascendente en el Ecuador, país donde los dos grandes Libertadores sudamericanos se dieron un abrazo histórico,  y nos coloca en el umbral de un nuevo ciclo que pueda consolidar la lucha que iniciaron nuestros próceres por la libertad, con la superación definitiva de la inequidad, la pobreza y el hambre de nuestra gente.

Junto a mi familia les mando a todos un cordial y afectuosos saludo y mis deseos de felicidad y bienestar para sus familias.